El fundador de una empresa tiene una visión.
Puede visualizar lo que imagina pasando en el mundo con la existencia de su empresa. El problema es que no siempre sabe comunicarlo, o hasta incluso confunde visión con ambición. Eso genera que no esté claro el PROPÓSITO y por lo tanto, que los empleados no terminen de sentirse comprometidos.
Para que una empresa prospere, TODOS sus miembros tienen que estar alineados a la visión. Eso es congruencia.
• Falta de claridad de la visión o propósito de la empresa
• Confusión entre visión, misión, ambición y rol
• Falta de acuerdo sobre criterios de toma de decisiones
• Conflictos permanentes o recurrentes
• Sensación de que nadie se “pone la camiseta”, ver que la gente simplemente cumple pero no aporta nada más.
• Ineficiencia, pérdida de recursos y tiempo
• Cortocircuitos en la comunicación
• Definir claramente la visión de la empresa
• Diferenciar visión, misión, ambición y rol
• Conseguir herramientas para comunicar esos ejes a toda la empresa
• Alinear la motivación de todos los empleados, que sus propósitos personales sean congruentes con el de la empresa
• Obtener mayores niveles de compromiso a partir de compartir valores claros
• Mejorar la comunicación interna
• Unificar criterios de toma de decisiones
• Agilizar los procesos internos
• Mejorar el clima de trabajo consiguiendo armonía y entusiasmo
• Aumentar la sinergia y la productivid